El dolor lumbar es común durante el embarazo, afectando a entre el 50 y el 70% de las mujeres. En algunos casos, el dolor se extiende a la región pélvica, conocido como dolor lumbopélvico.
El aumento del volumen abdominal durante el segundo trimestre de gestación es uno de los factores fisiológicos que generan cambios en el sistema musculoesquelético y que podrían intervenir en el dolor lumbar en la gestante.
Este aumento del tamaño uterino puede llegar a ser de hasta un 30% por encima de la condición de base, generando una distensión de la musculatura abdominal y una pérdida de su potencia, lo que afecta negativamente el control vectorial de la columna lumbar.
Además, el aumento de peso durante el embarazo genera una sobrecarga en la columna vertebral y los discos intervertebrales, lo que puede contribuir al dolor lumbar. El desplazamiento del centro de gravedad, la congestión venosa y el cambio en el total de agua corporal también pueden ser factores relevantes.
Es importante tratar el dolor lumbar durante el embarazo para prevenir la reaparición de los síntomas. La fisioterapia y los ejercicios específicos pueden ser útiles para fortalecer la musculatura abdominal y lumbar, mejorar la postura y disminuir el dolor.
Si estás embarazada y experimentas dolor lumbar, no dudes en buscar ayuda profesional para encontrar un tratamiento adecuado y seguro para ti y tu bebé.